Senasa: Trabajadores CAS se quedan sin empleo en pandemia

En setiembre pasado, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) emitió una carta informando a un grupo de trabajadores CAS que sus contratos concluyeron y no serán renovados. Estas, son personas en riesgo, mayores de 60 años y con enfermedades crónicas como hipertensión o diabetes. “El estado nos abandonó en la pandemia”, manifestaron.

En declaraciones al diario “La República”, uno de los afectados, no identificado, manifiesta que si bien la contratación CAS es temporal, Senasa tiene la potestad de prorrogarlo. “Están abusando, porque en mi caso jamás tuve una llamada de atención por hacer mal mi trabajo. La protección del trabajador por parte del Estado no se da por la actitud de malos funcionarios”, dijo.

Cabe precisar que el despido se genera pese a la existencia de un presupuesto y necesidad de servicios vigente. Según la fuente, es incierto si el Ministerio de Agricultura está al tanto de la situación de los trabajadores CAS en Senasa. Resaltó, además, que se siente maltratado de forma psicológica por recibir información indirecta de posibles contratos disueltos, convocatorias para que vuelvan a postular y retomar su trabajo.

Mientras tanto, los trabajadores activos han sido notificados que estarán solo hasta diciembre. O hasta dure la campaña de exportación de mango (marzo 2021). Y este es personal antiguo, locadores de servicio que pasaron a contrato CAS en 2008. Un año después, tuvieron que postular para continuar en sus puestos, pues dejaron de ser CAS. Y en 2011, en una nueva convocatoria para 20 puestos de inspección sanitaria.

“Estos colegas ya estarían postulando al mismo puesto por tercera vez, cada cierto tiempo los sacan y van a concurso con postulantes nuevos. Yo entiendo que es importante la renovación y debe darse de buena forma, no de esta manera arbitraria en la que saquen al personal. Hay trabajo, porque las exportaciones crecen. También hay presupuesto, pero hay mucha maledicencia. Lo que está pasando es algo sistemático, viene de años”, afirma.

Al respecto, la congresista de la República María Céspedes Cárdenas (Frepap), convocó al ministro del sector, Jorge Montenegro Chavesta, “se sirva a informar, con carácter de urgencia, las acciones realizadas por su despacho ante estos presuntos despidos arbitrarios en el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) adscrito a su ministerio”.

Senasa responde

El director general de Administración de Senasa, Lui Villa Villa, manifestó que se actuó conforme a lo establecido en la norma y que las razones han sido de orden técnico. Aunque  cabe precisar que el artículo 20 del Decreto de Urgencia 026-2020, se establece el trabajo remoto para trabajadores de grupo de riesgo. Y según el enciso 20.2m si la naturaleza de las labores impide su realización en trabajo remoto, mientras dure la emergencia sanitaria por el COVID-19, el empleador debe otorgar una licencia con goce de haber sujeta a compensación posterior.

“Senasa tiene un poco más de 5.000 trabajadores bajo los regímenes 728, CAS y de otra modalidad. Entonces, puede haber unos o dos casos aislados que no se puede hablar de que se les está desprotegiendo. Puede ser por inconducta funcional, por no cumplir con sus obligaciones o alguna situación parecida que ocasione la no renovación del contrato”, explicó Villa Villa.

Según el funcionario, la renovación de contratos ha sido casi automática durante la pandemia. Negó que trabajadores CAS postulen al mismo cargo para obtener un nuevo contrato. “Es falso. La mecánica es que, a todo el personal CAS, que son 1.700 trabajadores más o menos, se les renueva el contrato automáticamente. No tienen que postular para la renovación. El trabajador sí puede postular para ascender a un nuevo puesto. Si es especialista, tiene el perfil requerido y está en concurso, en ese caso sí postula”, dijo.

Precisó que en los casos de postulación, de no ser aprobado, continúa en su cargo anterior. Mientras que los casos de no renovación de contratos CAS, que afecta a personas vulnerables, se hizo conforme a la norma. Y la postulación a un mismo cargo es imposible. Y que por dos o tres casos aislados no se puede hablar de desprotección.