Transformando residuos en abonos

Lima Compost es un innovador emprendimiento que promueve el compostaje urbano, que consiste en transformar los residuos orgánicos de las cocinas en abono. Esta iniciativa peruana se convirtió en uno de los diez ganadores del programa YLAI Americas Accelerator.

“Compostaje urbano en transformar los residuos orgánicos, que son cascaras de frutas, verduras, cascaras de huevo, lo que sobra del plato, todo residuo orgánico que se genera de la cocina, en un abono que se llama compost, que es como la tierra”, explicó Raúl Valenzuela, administrador de empresas y fundador de Lima Compost.

Contó que su iniciativa viene operando desde hace cinco años en Lurín. Actualmente poseen un espacio de 200 metros cuadrados y al mes, producen 15 toneladas de compost. ¿Cuál es el proceso específico para armar el compost?, Valenzuela lo explica de esta forma:

“Armamos pilas de residuos orgánicos alzadas sobre el suelo, en igual proporción con materia seca, que son hojas secas, pasto seco y aserrín. Mezclamos todo en las mismas proporciones, lo volteamos periódicamente cada semana y al cabo de dos meses, se transforma en compost”.

Los residuos orgánicos los obtienen de los hogares de Lima y de las municipalidades que los contactan para servicios de compostaje. Aclaró que su emprendimiento no busca la comercialización del compost.

Detalló que con 10 kilos de residuos orgánicos, pueden producir 2.5 kilos de compost, el cual no tiene elementos químicos.

Raúl Valenzuela espera iniciar la construcción de una planta de compostaje industrial en dos años. El lugar aún está por definirse, aunque considera que podría ser Lurín.

Para leer el informe completo, puede descargar la edición N° 494 de la revista Agronoticias a través de este enlace.